Para los amantes de la decoración retro no hay nada con más encanto que poder recuperar objetos antiguos y convertirlos en elementos decorativos.
A nosotros, nos apasiona rastrear mercadillos, tiendas de segunda mano y negocios online de coleccionistas para buscar curiosidades, colecciones y antigüedades con personalidad a las que darles un nuevo uso.
En este post te hemos seleccionado los más populares en la decoración vintage para que tú también puedas introducirlos y decorar con ellos tus espacios.
Maletas antiguas, un objeto antiguo muy versátil
Quizá porque todos tenemos alguna en casa, quizá porque llevan detrás mucha historia o porque son versátiles a la hora de introducirlas en la decoración, lo cierto es que las maletas vintage son uno de esos objetos antiguos más comunes en la decoración retro.
La evolución de las maletas ha ido pareja al desarrollo de los transportes. Los primeros que empezaron a utilizarlas fueron los legionarios romanos, en sus periplos tras las batallas por conquistar el mundo. Posiblemente, las que tengamos en casa, o más a mano, en mercadillos y rastros, procedan de principios del S. XX, cuando los viajes de placer empezaron a ser una norma entre las clases más pudientes de Europa.
Nos gustan porque con solo introducirlas en nuestra decoración ya estamos transportándonos a otra época. Además, con un poco de maña, nos sirven como pequeño almacenaje o incluso, podemos convertirlas en coquetas mesas donde también podemos colocar algunos de nuestros adornos vintage favoritos.
¿Quieres descubrir cómo convertir una maleta en mesa? Hay cientos de ejemplos y videotutoriales en internet, como este de Facilísimo.
Portafotos, uno de los objetos antiguos más fácil de añadir en el estilo retro
Nos parece uno de los objetos antiguos que más fácilmente puede formar parte de la decoración retro. Y aunque pienses que su origen está ligado al de la fotografía, los marcos son mucho más antiguos: ya desde la Edad Media empezaron a ser populares para enmarcar las pinturas sobre tablillas y en el Renacimiento se convirtieron en objetos artísticos de gran valor. Obviamente, su popularidad vino marcada por el auge de la fotografía, desde el S. XIX y XX.
¿Quién no tiene en casa viejas fotos de antepasados y parientes? Si tu estilo es el vintage, tienes que desempolvar el viejo álbum y hacerles sitio.
La clave reside en que puedas encontrar fotos auténticas del S. XIX o XX, sobre todo retratos, ya que estos eran tratados con cuidado y atención al detalle y la pose. El blanco y negro será fundamental al igual que el ornamento del marco, a tu estilo (vintage) favorito.
Si quieres saber cómo sacarle partido, hablamos de ellos en este post sobre cómo combinar adornos vintage con mesas auxiliares.
Quinqué, una joya para la decoración retro
Aunque hoy en día es un objeto en desuso, es habitual encontrarlo en interiores que recrean el estilo de otros tiempos.
El quinqué, también conocido como lámpara de Argand (por el nombre de su creador) es una lámpara de mesa a partir de un mechero circular, que tenía una capacidad de iluminación superior a la de 7 ú 8 velas. A nuestros días ha llegado bajo el nombre de quinqué por las mejoras de Antoine-Arnoult Quinquet, quien introdujo en el mechero el tubo o chimenea de vidrio, que es el elemento por el que a día de hoy las reconocemos.
El quinqué desplazó rápidamente a todas las otras variedades de lámparas de aceite y se fabricaron en una gran variedad de formas decorativas, siendo su principal función iluminar los hogares hasta la mitad del S. XIX. Entró en desuso totalmente cuando apareció la electricidad, pero siguió estando presente como objeto decorativo en muchas estancias.
Había modelos de sobremesa y también con un formato adaptado para el techo. Incluso algunos quinqués de techo contaban con un interesante sistema para subirlos y bajarlos, lo que permitía encenderlos y apagarlos con facilidad.
Si quieres hacerte con uno de ellos, puedes recurrir a las páginas web de segunda mano (Mil Anuncios o Todo Colección tienen una buena selección) donde encontrarás desde sencillos modelos, con un punto más industrial, hasta auténticas joyas decorativas.
La radio es uno de los objetos antiguos que no puedes dejar pasar en la decoración retro
A pesar de que a día de hoy escuchemos la radio por internet y un aparato radiofónico sea considerado uno de esos objetos antiguos con una mera función decorativa o de colección, lo cierto es que las retransmisiones de programas de entretenimiento no tienen más que un siglo. La primera emisión fue justo el 20 de agosto de 1920 y ocurrió en Michigan. Desde entonces, y hasta la llegada de la televisión, la radio fue el electrodoméstico central de los hogares, alrededor del cual se reunía toda la familia, y que servía para entretener e informar a toda la población.
Philips, Bell, Radiola y Telefunken fueron las primeras marcas que comercializaron los receptores desde los años 20 y que posteriormente se adaptaron también para fabricar transistores y, más tarde, televisiones.
En la decoración vintage, vamos a encontrar tanto transistores de los años 50, con un estilo pop, como modelos de radios más antiguos, de principios de siglo, realizados en madera y con un acabado próximo al lujo. Tanto si te decantas por unos como por otros, te animamos a que los coloques dándoles el protagonismo de antaño: en estanterías o sobre aparadores, centrando la atención sobre ellos.
Si estás buscando uno de ellos, Ebay es un buen sitio para encontrar algunos modelos con bastante solera, incluso gramófonos.
En la decoración retro no pueden faltar las cajas de lata
El latón fue el material con el que se fabricaron los primeros “packagings” de la era industrial, por lo que es muy habitual encontrar cajas de lata que servían para envolver desde pastillas, bombones y galletas, hasta papel de fumar.
Si te interesa saber más sobre la historia y la evolución de la hojalata, te animamos a ello porque es bastante curiosa. En este artículo puedes encontrar bastante información sobre su origen (en la Edad Media) y su posterior evolución hasta convertirse en el primer envase de producto de la Era Industrial.
Las cajas de hojalata son también objeto de coleccionismo. Por su popularidad, son fáciles de conseguir y su precio suele ser económico, por lo que si estás pensando en convertirte en coleccionista de objetos antiguos este es uno de los más asequibles.
Puedes encontrarlas en mercadillos de segunda mano y en tiendas online de objetos retro, como algunas de las que te mostramos en este post (link al post de las tiendas).
Algunas marcas siguen manteniendo como tradición elaborar algunos de sus productos gourmet envasándolos en latas de colección exclusivas y de venta temporal, como las de La Despensa de Palacio, que cada Navidad recrea un diseño con estética retro inspirado en ilustraciones antiguas, para poner a la venta sus deliciosos dulces navideños. Una dulce colección, sin duda.
Otros objetos antiguos como las máquinas de coser están muy valoradas
La primera máquina de coser de la historia fue un sencillo invento del alemán Fredrick Wiesenthal, que patentó un instrumento mecánico compuesto por una aguja con dos puntas y un ojal en el extremo. A partir de ahí, y con el apoyo de muchos sastres que también se convirtieron en inventores, la máquina de coser no paró de evolucionar hasta convertirse, de la mano de Singer y en la mitad del siglo XIX, en un valorado utensilio del hogar. La exposición Universal de París, en 1855, fue el origen de su expansión por Europa. Como curiosidad, Singer tenía un innovador sistema de ventas y entregas, garantizando las reparaciones y el canje de viejos modelos por los más modernos. También establecieron un sistema de alquiler con opción a compra, con lo que la estrategia comercial, unido a las ventajas que proporcionaba la máquina, la hicieron muy popular.
Seguramente, la vieja máquina de coser que hay en tu casa o que has visto en alguna tienda de segunda mano tenga la manufactura de Singer.
Actualmente, es uno de los objetos antiguos más valorados en la decoración retro y existen mil formas de introducirlas en tus espacios:
Dado que el mecanismo, en muchos de estos modelos, se extendían a los pedales y a la mesa, puedes añadirlas a tu espacio vintage como un elemento industrial completo. Será en sí un objeto de decoración. Para ello, será importante que dispongas de espacio y tenga sentido introducirla como tal. Puedes incluir algunos detalles, como plantas o flores.
Si tu espacio es limitado y quieres sacarle el máximo partido, puedes recuperar solo una parte de ella y usar esta como elemento decorativo, o bien, quedarte únicamente con la parte inferior y convertirla en una mesa auxiliar con mucho encanto, la cual puedes terminar con una tapa de madera natural o incluso con una caja de madera reciclada. También puedes colocar un cristal en la parte superior y hacer con ella una mesa de trabajo de grandes dimensiones.
Si buscas más ideas originales, en este post vas a encontrar treinta soluciones creativas para decorar con máquinas de coser.
Botellas de cristal y sifones para decorar
También nos encontramos que las botellas de cristal y los sifones son objetos antiguos asequibles y que dan mucho juego en la decoración retro.
A nuestros días han llegado modelos originales del siglo XX gracias a su popularidad y su amplia introducción en todos los estratos sociales.
En España, concretamente, era muy popular encontrar sifones de agua carbonatada o de Seltz, gaseosas o soda.
Muchos, los más valorados para los amantes de lo vintage del siglo XX, aún conservan inscripciones publicitarias y marcas de la época con las que se ponían a la venta, y que hoy son objeto de culto.
En la web de Anticandchic vas a encontrar una amplia selección de modelos antiguos, muchos podrás incluso ponerlos en uso para preparar tu propio vermú en casa.
Objetos antiguos de hace medio siglo, los teléfonos
El nacimiento y la evolución del teléfono sigue la senda de otros inventos que se desarrollaron a finales del S XIX y que fueron grandes innovaciones a principios del S XX.
Por cierto, ¿sabías que desde el año 2002 se reconoce a Meucci como su inventor (quien lo desarrolló para comunicarse con su esposa dentro de su domicilio) y no a Bell, que fue quien lo patentó?
Para algunos puede resultar chocante que este objeto, tan común en nuestros domicilios hasta hace un par de décadas, se haya convertido en un elemento propio de la decoración retro.
Y no (solo) hablamos de los primeros teléfonos, que se colgaban en la pared y a los que se accedía a nuestro interlocutor a través de una centralita. Tampoco hablamos únicamente de los modelos más historiados, con aspiraciones barrocas y que se hicieron populares en los años 50.
Hoy podemos considerar como objetos antiguos muchos de los teléfonos de los años 60 y 70 que encontrábamos en casa y en cualquier oficina.
En estos años se hicieron populares los teléfonos con marcación, (con rueda o con rejilla de botones, donde poder marcar el número deseado) con acabado de plástico y colores brillantes.
Si tu modelo es de pared, te recomendamos que lo sitúes en la pared del recibidor y si es uno de los modelos más contemporáneos, de sobremesa, su lugar ideal es en una consola o en un aparador.
Si no tienes ninguno en casa y quieres conseguirlo, también hay buenas réplicas en las tiendas de decoración contemporánea y en Amazon, eso sí, olvídate de que funcionen.
Esperamos que este post te haya inspirado y te animes a recuperar esos objetos antiguos que tienes en casa con los que podrás crear una decoración retro.
Síguenos, la próxima semana te contaremos más sobre decoración vintage.